A mí, me gusta Motley Crüe. Nunca dejaré de colgarme mi air guitar cuando escuche Dr. Feelgood; baquetas imaginarias aparecerán en mi mano cada vez que suene con estruendo Same Ol' Situation; y cada vez que Without You salga de los altoparlantes querré desgarrar mi camisa. Pero todo lo anterior no fue una razón suficiente para comprar un boleto para su paso más reciente por la Cd. de México, por una sencilla razón, a mí nadie me regala dinero. ¿Por qué he de cooperar con la manutención del Starbucks en el salón de juegos de Tommy Lee? ¿Por qué voy a seguirle dando lana a Vince Neil, para que siga saliendo con top models, aunque tenga el cuerpo de Enrique Guzmán?
Estoy en contra de los artistas que hace dos o más décadas, tuvieron su momento, un día se acaba la magia, descubren que para ser los Stones, U2 o incluso Madonna, lo primero que hay que hacer es trabajar (en grabaciones para seguir vigente y en giras y más giras que demuestren que sabes lo tuyo en el escenario) y después de algunas cachetadas y dos o tres sustos-por-sobredosis, desaparecen en silencio. Y entonces... BANG! veinte años después, ya que se enteraron de que ser carpintero o agente aduanal no es vida, hacen las paces, sacan una rolita chafa como track plus en una enésima recopilación de hits y a viajar por el mundo para hacer una afore harto grandotota (ahora sí, tocando en Queretaro, Cochabamba y Tegucigalpa). La verdad QUE OJETES.
Y este fenómeno se reproduce como gremlins pasados por agua: KISS, Motley Crüe, Poison, Bee Gees, Blondie, Duran Duran, New Order, Pixies (muy buenos muy buenos pero no es lo mismo); en español como no: Hombres G, Fobia, La cuca, La Lupita (aquí el fenómeno de juntarse aunque sea el 50% de la banda y hacer cara de ¿cómo, no te acuerdas que este bajista de 18 años siempre tocó con nosotros?) Jumbo, Zurdok, La gusana ciega (estos últimos tres se reunen despues de 12 o 18 meses de su gira de despedida y dejando un legado de dos producciones) y para finalizar, ejemplos francamente bochornosos de-plano-robo-a-mano-armada como Flans, Timbiriche, Menudo, Backstreet Boys y por supuesto Bronco.
Así que yo les aconsejo que la siguiente vez que su artista favorito se reuna, antes de pagarle un boleto, toquen a la puerta de su camerino y después de explicarle que han pasado 20 años y a pesar de que tienes pancita, poco pelo o menos ganas de fiestear sigues siendo su fan, le pregunten...¿Me prestas lana para pagar mi tenencia?
1 comentario:
Bien dicho Yugus! La neta es que hay hartos batos que se reúnen para hacerse de más lana, y lo único que hacen es el ridículo. Para muestra, ahí está Motley en el Live8... DEPRIMENTE... Me cae que alguien debería decirle a Tommy Lee que como pianista es un excelente baterista, ¿no?... Fueron -repito fueron- buenos... movieron a toda una generación... pero ya estuvo. Como dice el papá de Mafalda... basta de "las mismas momias recalentadas de siempre".
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