MI 2006 LETRA POR LETRA

Acereros de Pittsburgh. No sólo fue la primera vez que presencié como el equipo de mis amores ganaban el trofeo Vince Lombardi, también fue una de las borracheras más grandes de mi vida.

Barcelona. Barcelona campeón de Europa. Barcelona la Boquería. Barcelona Gaudí. Barcelona bicampeón de España. Barcelona la Rambla. Barcelona bocadillos de chuleta, roquefort y pepinillos.
Carlos y Marina. Dos bodas. Dos buenos amigos y una gran semana en Lippstadt.
Departed, The. Me gusta Scorsese de regreso (¡viva Henry Hill!), me gustó mucho el soundtrack y contra lo que opinan los obtusos, confirmé que DiCaprio es un gran actor.

El amor en los tiempos del cólera. Fue mi primer acercamiento voluntario a García Marquez. Quedé impresionado.
Frank Sinatra. Nada en especial, pero este año siguió creciendo mi pasión por la música de crooners, cuyo símbolo innegable es Blue Eyes.
Gelsenkirchen. Viajar tantos y tantos kilómetros para confirmar de cerca que nuestra selección es una mierda así como el comportamiento colectivo de mis paisanos.

Hips don't lie. Palau Saint Jordi, Julio 2006. ¡Feliz cumpleaños Peluca!
IPod. Sobra decir lo que me cambió la vida con esta maravilla.
James Bond. Fui de la serie de prejuiciosos que se unió para pedir que no dejaran a Daniel Craig calzar los zapatos de 007. Perdón: me equivoqué.

Killers, The. Es uno de los grupos "nuevos" que más me ha entusiasmado, desafortunadamente tanta espera de su Sam's Town fué un desperdicio.
Lava Lamp. Simplemente uno de los mejores regalos de mi vida.
Morrissey. Su disco Live from Earls Court fue el que más escuché durante el año, su versión en vivo de There's a light that never goes out es la que mayor número de reproducciones marca mi iPod. Verlo en vivo en el Palacio de los Deportes fue presenciar historia contemporánea.

"Negro" Gonzalez Iñarritu. Con todo y que no la considero ninguna obra maestra, Babel me gustó mucho. Este fue el año dónde todos los posers del mundo se decían fans, amigos o mentores del Negro.
Ñañaras. El video de Valentín Elizalde y las cabezas en pistas de antro.
Oacalco. Fiesta curiosa y divertida. Gran madrazo en las nalgas. ¡Anis time!
París. Había una vez un bloguero estúpido, que deseaba omitir a la Ciudad Luz de su itinerario de verano. Hoy ese mismo individuo se muere por regresar (con mi Peluquita, si no, no).

¿Quién puso el bomp?

Rowland. Era viernes y no había litros de cerveza por las esquinas, ni canciones que cantan todas las niñas y nadie haciendo cola allá en el baño; sin embargo estuve ahí, tomándome un poquito de ron (con coca, sin zumito de piña).
Sevilla. Miguél Bosé tenía razón: "El corazón que a Triana va, nunca volverá".
Todavía una canción de amor. Durante años intenté escuchar a Don Andrés Calamaro y nunca terminaba de convencerme. Este año si se pudo y se puso poca madre.
U2. Desde que ví Rattle and Hum, y salían tocando Where the streets have no name con el escenario del Sun Devil totalmente en rojo, tenía muchas ganas de verlos. Misión cumplida (lástima por el ingeniero de sonido).

Vejez. Nacido el 5 de Abril de 1976, este era un año marcado. Ni modo.
Warpig. Este gordito y todos sus cuates de DIXO se hicieron visita indispensable. Me gusta leerle blogs a Peluca.
Xenofilia. Es un mal nocivo para la ciudad que crece todos los días.
Yugus 2.1
Zinedine Zidane. El cabezazo a Materazzi es para mí, la imagen del año.